¡¡¡Holas!!!
¿Te has sentido estresado? ¿Ha sido algo puntual o es algo que sientes de manera sistemática?
Aunque el estrés es algo inevitable, especialmente en los tiempos en los que vivimos, no debemos quitarle la importancia que tiene y tenemos que trabajar para reducirlo al máximo y mantenerlo en los niveles que podemos considerar óptimos como parte de nuestra motivación diaria.
Hoy en día tenemos muchísimos factores que producen un aumento del estrés en nuestras vidas: presión laboral, falta de sueño, mala alimentación, salud, relaciones…Cualquier preocupación que se alarga mucho en el tiempo puede ser una causa clara de estrés.
Lo primero que debemos hacer cuando nos sentimos raros y empezamos a sospechar que el estrés es el causante de esta sensación, es sentarnos e intentar averiguar cuál es la fuente que nos lo causa. A veces es evidente, lo tienes más que identificado. Pero otras no. Para ello es recomendable que uses las páginas matinales. Hablamos de ellas en la rutina de mañanas productivas. Escribir un poco cada mañana ayuda a liberar nuestra mente y soltar todo lo que se nos pasa por la cabeza, dejar libre el bolígrafo y que todo fluya sobre el papel. Seguro que así descubrirás cosas que te preocupan y no habías reparado en ellas hasta ahora.
En el post de planificación con el método de los cuadrantes os había contado que todas las tareas que podamos meter en el cuadrante 2 (importante/NO urgente) nos darán tranquilidad y en definitiva felicidad. Nuestro problema, es que tendemos a ponerlo todo en el cuadrante 1 (Importante/Urgente), o 3 (NO importante/Urgente), por lo tanto, nuestro estrés por tenerlo todo listo cuanto antes nos causa esa sensación de no llegar a nada a tiempo, de no tener horas suficientes, y de fracasar en lo que nos proponemos. Resultado: ESTRÉS.
Con esto, el primer consejo para evitarlo es la organización y la buena administración del tiempo. Además, tendremos que aprender a decir NO, y saber honrar nuestra palabra. Si nos hemos comprometido a hacer algo lo haremos, bien y a tiempo, pero si a la hora decidir si meterte en un proyecto o no, ya sabes que no vas a conseguir llegar, que es demasiada carga con todo lo demás que tienes es ese momento, entonces di NO. Es mejor decir NO desde el principio que quedar mal al final por no cumplir tu palabra.
Ten en cuenta que el descanso será tu mejor baza. Si lo que sufres es un estrés sistemático por tu situación laboral o personal, entonces es aún más importante. Debes conseguir descansar, y que tus sietes horas mínimas de descanso nada te las quite. Lo notarás en tu humor por las mañanas y en tu rendimiento diario. Te recuerdo que, quitarte horas a tu descanso no se traduce en más horas productivas.
El ejercicio y el cuidado personal son imprescindibles, es una manera de que tu cuerpo sepa lo fuerte y sano que estás, y eso te dará energía, y liberará hormonas que te harán sentir de maravilla. En cuanto al cuidado personal, no hace falta que te vayas al spa cada dos días, pero el momento de desmaquillarte y ponerte crema puede ser un rato para ti, hazlo con cariño y ¡no a la carrera que parezca que quieres borrarte la cara (todas lo hacemos, ¿verdad?! Haz que tus rituales diarios te gusten y que esos momentos que te dedicas a tí cada día tengan mucho valor, que no quieras perdértelos por nada. Estos hábitos pueden ser tu parte positiva del día, y sabes que estarán ahí pase lo que pase, por mucha locura que hayas tenido o vayas a tener en tu jornada.
Distracciones. No me refiero al móvil, que os veo venir. Cuando tenemos algo en la cabeza que nos preocupa es bueno saber despejarnos de vez en cuando, especialmente si arreglar ese problema está fuera de nuestro alcance. Aprende a distraerte, a saber qué te funciona para dejar la mente lo más despejada posible. A mí me encantaría saber meditar, es algo que se recomienda muchísimo. Lo he intentado varias veces, hay muchas apps que te pueden guiar, suelen ser solo unos minutos… pero la verdad es que a mí se me va la mente a otra cosa. Tengo que darle otra oportunidad, porque la meditación nos ayuda a alejarnos de esa obsesión que nos está produciendo la sensación de estrés continuada.
También es ideal crear ambientes relajantes. Por ejemplo, para leer, o para ducharte, o mientras estas delante del ordenador enciende unas velas, no uses luces blancas, pon aceites esenciales con algún olor que te guste. Sé que hay estudios de aceites que debes usar para reducir el estrés y aumentar tu concentración, pero la verdad es que no me lo sé L. Buscaré información y os lo paso. Yo uso aceites esenciales, pero mi única criba es que me guste como huelen, criterio CERO J
Por último, quiero decirte que tengas cuidado con la gente que hace como que está estresada todo el día, seguro que tienes a alguien así cerca, que es como que toda su vida es una locura. Hay a quien le encanta quejarse, le encanta ofenderse y le encanta que le digan que qué duro es su día a día. Tranquil@, no están estresados, es solo una fachada, cuando llegan a su casa duermen bien, se levantan tranquilos y pasan su día sin más, sin embargo, tú te has quedado con lo tuyo y con toda la historia que te ha contado. No te quedes con el estrés que irradien los demás, aprende a separar, solo puedes controlar lo tuyo, céntrate en eso y con tu serenidad ayudarás a los demás a estar tranquilos.
Aquí cierro por hoy, no sin deciros que todos necesitamos un puntito de estrés, esa pizquita que nos da la motivación y nos mantiene activos a diario. Pero nada más allá. ¿Vas a controlarlo? ¿Prometido?
Nos vemos en las redes;
Muaksss
Vero
